Quién sabe cuántas niñas pequeñas aprendieron a andar en patineta imitándola en el video 'Complicated'. Quizás gracias a ella, más son los que se han puesto a garabatear canciones en sus dormitorios y cantarlas. Si incluso la última generación de estrellas pop como Billie Eilish y Olivia Rodrigo consideran a Avril Lavigne como una de sus principales fuentes de inspiración, entonces significa que el impacto de la cantautora canadiense -ahora de 38 años- en la música pop ha sido verdaderamente enorme. Exactamente veinte años después de su primer concierto en Italia, el que la vio actuar en el escenario de Alcatraz en Milán en la primavera de 2003, Avril Lavignede está de vuelta de gira en el país.
Estará en concierto en el Kioene Arena de Padua, mañana en el Assago Forum de Milán: la esperan unos 15.000 fans en total, que no han dejado de seguirla en estos veinte años.
En ese momento, entre el lanzamiento de su álbum debut 'Let go' y el de 'Under My Skin', Avril Lavigne relató en sus letras su adolescencia, sus inseguridades y sus miedos, junto con sus esperanzas y sus ambiciones. Detrás de esa larga cabellera rubia, ese delineador negro muy marcado en los ojos, las tachuelas y esa actitud rebelde, ese estilo que la convirtió en un ícono para las adolescentes, había una chica que partió de un pequeño pueblo de Ontario, Napanee, para conquistar el mundo.
Luchar contra los prejuicios y las críticas. Veinte años después, Avril Lavigne dice que sigue siendo la misma de entonces: “Siempre me he llamado la 'motherfucking princess' porque soy mi propia jefa. Mi visión de las cosas no ha cambiado mucho, aparte del hecho de que empecé a los 17 y ahora soy mujer". En el disco 'Love sux', lanzado a principios de 2022, la cantautora canadiense ha querido recuperar ese papel de chica mala que era imposible no topar a principios de los 2000 viendo MTV.
En las canciones del disco, editado por DTA Records, el sello de Trevis Barker de Blink-182, Avril Lavigne se rinde homenaje a sí misma hace veinte años, recordando su grandeza también gracias a que jóvenes artistas como la ya mencionada Olivia Rodrigo y Billie Eilish la consideran ella un modelo a seguir: “Para este álbum realmente volví a los sonidos que me influenciaron al comienzo de mi carrera. Esencialmente, sigo siendo una chica de un pueblo pequeño que escuchaba bandas como Blink-182, Green Day y NOFX en la escuela secundaria”, dijo.
Olivia Rodrigo también la conoció. Ocurrió hace un año y medio, justo antes del lanzamiento de 'Love Sux', en el escenario del Variety Hitmakers Brunch en Los Ángeles, donde. Avril Lavigne entregó a la joven colega el premio a "Compositora del año": "Gracias por traer el rock'n'roll de vuelta a las listas", dijo. La cantautora canadiense tenía más o menos la edad de Rodrigo cuando escaló las listas mundiales con las canciones de 'Let go', vendiendo 6,9 millones de copias solo en Estados Unidos y 16 millones a nivel mundial gracias a éxitos como 'Complicated' y "I'm With You', lo que la convirtió en portavoz de su generación.
Veinte años después, Avril Lavigne ha cerrado el círculo. En el video de 'I'm a Mess', uno de los sencillos que anticipó el lanzamiento de 'Love Sux', a dueto con Yungblud, corre con la patineta tal como lo hizo en el icónico video de 'Complicated'. Y para celebrar el aniversario del lanzamiento de 'Let Go', además de lanzar una reedición del disco, la cantautora regresó a Canal Street de Nueva York y recreó la portada de su álbum debut en el mismo lugar de donde salió la fotografía. La voz de 'My Happy Ending' luego publicó un clip en TikTok para mostrar el resultado de su operación de nostalgia “20 años después…”.
Escrito por Mattia Marzi para Rockol Italia | rockol.it
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